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La personalidad corporativa se expresa cuando la misión no se escribe, se vive y se ejecuta. Así se trasciende. Así es el pasado, presente y futuro de IZYFCO, empresa constructora con 30 años de exitosa gestión ejecutada bajo el liderazgo del Ing. Pablo Izquierdo Rivera, su Presidente.
Pablo Izquierdo Rivera
El portafolio de obras incluye una enorme variedad de tipologías. Entre ellas, la construcción de infraestructura, edificios, proyectos inmobiliarios, rehabilitación urbana y restauración patrimonial, proyectos en los cuales se evidencia la transparencia y prolijidad en la gestión corporativa.
Pablo continúa al mando de la empresa, de la que ahora forman parte activa sus hijos, Cristina y Pablo, ingenieros civiles; y Sara, arquitecta, que se encargan de gerenciar los proyectos. Alexandra, la madre, maneja los asuntos financieros.
Con ellos hacemos un recuento de la estructura de la empresa, sus antecedentes y lo que proyectan a futuro en el ámbito de la construcción.
¿Cuál es el enfoque empresarial?
Nuestro plan estratégico contempla metas y mejoras muy definidas de facturación, calidad y eficiencia para los próximos 5 años. Crecer en todas las líneas de negocio, y principalmente en la construcción de proyectos privados. Detectamos que el sector empresarial en general no tiene muchas opciones para desarrollar sus proyectos corporativos, comerciales o industriales, con garantías de servicio y cumplimiento en calidad, tiempo y costo. La construcción es un servicio y así lo entendemos. Tenemos la ventaja de trabajar a nivel nacional, con 30 años de buenos resultados en amazonía, sierra y costa.
Alexandra Flores, Pablo Izquierdo, Cristina Izquierdo y Pablo Izquierdo Rivera
¿Qué hay en esos 30 años?
Muchísimos proyectos privados y también públicos, de todo tipo. Hemos enfrentado diversos desafíos pues cada obra tiene su complejidad. Obras hidráulicas por ejemplo, distintos métodos constructivos, recuperación patrimonial y obras que requieren tiempo récord de ejecución con ingeniería de alto nivel. Pero en nuestro servicio no sólo hay obra dura e ingeniería; dentro del equipo hay quienes se dedican a proyectos que requieren diseño, buen gusto y detalle.También hemos construido proyectos inmobiliarios propios y de terceros, asesorando incluso a los inversores en las estructuras financieras y comerciales adecuadas para un desarrollo impecable con buena absorción y rentabilidad.
¿La empresa es familiar?
Sí. Con el paso del tiempo la segunda generación se fue preparando para tomar la posta y ahora prácticamente están a cargo de la empresa. Cristina y Pablo en proyectos de construcción, y Sara en los proyectos de arquitectura y diseño, aunque ahora se encuentra en España temporalmente siguiendo su especialización. Pablo padre apuntala con su visión y experiencia, y los jóvenes ponen el aporte de creatividad e innovación que requieren los nuevos tiempos. Este equipo familiar, junto al valioso talento humano que nos acompaña ha permitido que la empresa dé un salto importante en cuanto a su organización y visión de futuro.
¿En qué sentido es valioso el aporte de la segunda generación?
Ahora podemos abarcar muchos proyectos simultáneamente, pero más allá de eso, estamos en capacidad de dotarlos de una mirada actualizada, innovadora, conjugada con el valor de la experiencia, para lograr la ecuación deseada. Estos últimos años, en que se integraron las dos generaciones en un equipo, han sido maravillosos a nivel de crecimiento empresarial. Principalmente la visión de servicio y la profesionalización. Integrar un directorio que da formalidad a las decisiones que se toman en base a información de mercado e indicadores de gestión; implementar procesos, fijar metas y responsabilidades. Una empresa familiar es sobretodo una empresa, y debe manejarse como tal. Ese ha sido el aporte de la juventud, que nos proyecta al futuro.
¿La transición fue paulatina?
La empresa ha vivido varias etapas de transición a lo largo de sus 30 años de historia. En esa época la moneda nacional era el sucre, ahora es el dólar; se construían conjuntos residenciales pequeños y había pocos constructores, ahora hay muchísimos; las instituciones públicas eran las promotoras de los programas habitacionales y ahora esa actividad está en manos de la empresa privada. Son muchas etapas superadas a lo largo de estos años, y se debe básicamente a la capacidad de reacción que tenemos lo que nos permite adaptarnos a diferentes situaciones del país. Mientras todo eso sucedía los chicos iban creciendo y preparándose para tomar el control a futuro. Han hecho su propia experiencia y se especializan constantemente. El aprendizaje es una constante en esta empresa.
¿Cuál fue la evaluación de la segunda generación cuando se integraron?
Vieron una empresa sólida, con valores y mucha experiencia. Con esos antecedentes llegó la hora de profesionalizarla y proyectarla al siguiente nivel, para posicionarla como una constructora líder del mercado y referente en el país.
¿Cómo fue el proceso de reestructuración?
Empezamos con una consultoría externa sobre protocolo de empresa familiar. Luego formamos un directorio, con aportes externos de alto nivel y reconocimiento empresarial para ampliar la visión. Trabajar en las metas a mediano plazo y su estrategia, y a la vez en la cultura interna. Dividir las responsabilidades según cada línea de negocio, fijar comités que se encargan de innovación, crecimiento, operaciones, etc. Todo este proceso tiene algunos pilares fundamentales, entre ellos el sentido de urgencia, la flexibilidad e innovación, y sobretodo la seriedad en cuanto al cumplimiento en todos los sentidos, tanto internamente como hacia nuestros clientes y la sociedad. El recurso más valioso que la juventud entrega en la empresa es su energía y motivación. El positivismo en cada acción y en cada rincón de la empresa es lo que ha traído consecuencias positivas.
¿Resultados?
Al momento son buenos en todos los frentes. Tanto cualitativos como cuantitativos, y tenemos metas claras que se cumplen y se superan. Estamos en una situación óptima para aprovechar la capacidad de construir que tenemos como grupo. Esta es una empresa de impacto en el mercado de servicios de construcción a nivel nacional. Podemos servir al cliente empresarial y corporativo en sus necesidades de crecimiento y desarrollo de su planta física e infraestructura, con el sistema constructivo y tipo de contratación que requiera. Somos especialistas en proyectos llave en mano y el resultado ha sido muy satisfactorio para los clientes y entonces lo es para nosotros.
Jaime Sánchez R., socio inmobiliario, Cristina Izquierdo y Pablo Izquierdo
¿Qué ámbitos abarcan?
Hemos construido para muchos sectores: industrial, empresarial y corporativo, educativo, vivienda, salud, lotizaciones, obras públicas, infraestructura, equipamientos urbanos, en fin. Tenemos la experiencia y la capacidad para actuar en casi cualquier sector, con proyectos desafiantes que nos encantan, en las distintas geografías del país. El tamaño de la obra tampoco es un limitante. Hemos construido para nuestros clientes desde casas unifamiliares hasta proyectos de mediana envergadura.
¿Se los puede contratar por etapas o solo por obra completa?
Proponemos varios modelos de trabajo, llave en mano es el más integral de todos, o se nos puede contratar por tramos de la obra general, pero también puede ser una administración delegada. Nuestras propuestas se detallan con precios por rubro o por volumen ejecutado, depende del interés del cliente. Manejamos sus recursos optimizando las compras y el porcentaje de afectación al costo directo de la obra. Trabajamos también en interiorismo, hace poco remodelamos 3.000m2 de una empresa en 60 días con nivel de detalle muy importante. Somos generadores de confianza en todos los ámbitos de la construcción, y garantizamos cumplimiento basándonos en tres pilares fundamentales: tiempo, calidad y costos. Todos estos beneficios se trasladan al cliente final.
¿Se encargan de definir proveedores?
La materialidad y acabados se eligen por sugerencia nuestra en conjunto con el cliente velando por el mejor interés en el resultado final del proyecto. Tenemos capacidad de alcanzar costos interesantes en cuanto a material, y manejamos procesos y sistemas que nos permiten trasladar eficiencias a favor del cliente.
Tremenda muestra de eficiencia…
Es el fruto de la experiencia que produce mejoras constantes. Estamos avanzando siempre en la curva de eficiencia y a la vez aprendiendo algo nuevo cada día, y con cada obra, porque siempre es posible innovar y hacer las cosas mejor. Nuestro valor agregado está en el cumplimiento, superar las expectativas y garantizar la calidad no solamente al entregar a satisfacción la obra. Nos quedamos junto al cliente construyendo una relación de largo plazo. Por eso le damos especial énfasis al servicio de post-venta.
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