Por: María Cárdenas R.
Diciembre – enero, 2012

Lo más importante es que los materiales son todos cosas muy sencillas. Hay ángeles cuya base son botellas de bebidas desechables pequeñas a las que visto con cáñamo.

CLAVE! rinde un merecido tributo a dos maravillosas mujeres que con esfuerzo personal, buscan recaudar dinero para hacer felices a algunas familias en esta navidad. A consecuencia de esta noble iniciativa, habrá hogares celebrando estas fechas con regalos muy especiales, esos que nacen solamente en los buenos corazones. Para ellos, gracias a Cristina e Isabel, esta será la perfecta Navidad.
Del fin benéfico de este emprendimiento nos enteramos durante la entrevista. Fue una inesperada y grata sorpresa porque cuando lo vimos promocionado nos pareció la mejor idea de la temporada, digna de ser compartida con nuestros lectores, y las contactamos porque ofrece una solución al ajetreo de estas fechas que siempre nos llegan antes de tiempo
Aunque la navidad inspira sentimientos positivos y deseos de poner hermosamente navideños nuestros hogares, siempre hay el dolor de cabeza del árbol, los bombillos y luces, guirnaldas y más. Aquí es donde la genialidad de Cristina e Isabel se manifiesta junto a su creatividad, laboriosidad y generosidad de espíritu. Esta es la historia…
¿Cómo nació la idea de arrendar árboles de Navidad?
Isabel responde: desde que tengo uso de razón, el que mi mamá pasara un mes antes de la fecha en que acostumbramos armar el árbol, usando sus habilidades manuales para con los más simples y comunes materiales crear espectaculares adornos para el árbol de Navidad, se convirtió en una especie de tradición Ya te imaginarás que a través de los años hemos acumulado una enorme cantidad de adornos para el árbol.
¿Ese es el origen de esta idea?
Sobre todo que esas fechas siempre fueron muy especiales para la familia porque verdaderamente “sentíamos” la navidad. Mi primo Santiago Uribe, quien conoce esta tradición familiar, pensando en grande me preguntó por qué no exportábamos la idea de la decoración del árbol a Estados Unidos, donde ya existe un mercado. Lo conversamos entre nosotros, y pensé que sería maravilloso “explotar” las habilidades y creatividad de mi mamá y hacerlo en Quito.
¿Qué fue lo primero?
Teniendo claro que las fotos hablan más que las palabras, armamos cada uno de los árboles que nosotros habíamos tenido y logramos completar doce. Tomamos fotos, las subí al Facebook y mandé a mis contactos de mail. Así comenzó la venta.
Cristina, ¿son las decoraciones originales que habías usado en tus árboles y las tenías embodegadas?
En realidad no son las originales porque no sólo creo algo nuevo cada año, sino que reciclo dando nuevos toques a cosas que ya habían sido utilizadas. Lo más importante es que los materiales son todos cosas muy sencillas. Hay ángeles cuya base son botellas de bebidas desechables pequeñas a las que visto con cáñamo. A estos ya les cambié el “look” usando bolas de diferentes tamaños de espuma flex recubiertos de piola u otros materiales. Tengo diferentes adornos que los hemos hecho siempre con la ayuda de la gente que trabaja con nosotros.

Recordé algunos árboles que había decorado y renovándolos con pequeños toques quedaron listos. Estamos ofreciendo doce modelos distintos para esta navidad.

¿Y con todo esto armaron el catálogo?
Así es. Recordé algunos árboles que había decorado y renovándolos con pequeños toques quedaron listos. Estamos ofreciendo doce modelos distintos para esta navidad. Me encantan las cosas que hago cada año, y si el negocio funciona tan bien como hasta ahora, el próximo año me tocará trabajar los doce meses para crear no sólo doce modelos, sino muchos más. Lejos de ser un trabajo es algo que disfruto mucho.
¿Una habilidad que se volverá rentable?
Rentable a nivel de satisfacción personal y espiritual porque la idea es que con el resultado económico de este negocio podamos agasajar a unas pocas familias. Eso me gusta más todavía, esa es la razón por la cual lo estamos haciendo. No queremos tener las cosas guardadas en una bodega, queremos usarlas con un fin benéfico, solidario, y hacerlo con cariño. ¿No es ese el verdadero sentido de la Navidad?
Cuando me encargaron hacer esta entrevista no sabía que el fin era benéfico…
Pero lo es. Con lo que recaudemos vamos a comprar canastas navideñas y regalos para dárselos a algunas familias en navidad. Eso es lo que nos motivó a involucrarnos en este proyecto.

La creatividad hace realidad una fantasía. La Navidad de cada familia es sobre originalidad, cada árbol debe ser único.

¿Cómo van las ventas?
En la primera semana, luego de que mostramos las fotos de los 12 árboles disponibles se había vendido el 60%, así que estamos muy contentas. Y si las cosas siguen así, podremos ser más ambiciosas y crecer inclusive hasta llegar a la idea que nos recomendaron que fue la de enviarlos, no como arriendo, sino como venta, a los Estados Unidos.
¿Cómo funciona el negocio de arriendo?
La idea, o más bien dicho, el concepto, es arrendar la decoración del árbol por el tiempo que cada persona quiera, sin que esto cambie el costo. Cada familia tiene sus costumbres, algunas arman sus árboles semanas antes y los dejan hasta semanas después; otros los dejan por poco tiempo. Estos gustos hay que respetar. El otro aspecto del concepto es brindar facilidades y comodidad a la gente que hoy no tiene tiempo. Las madres que trabajan y cuidan de sus familias también quieren un hermoso árbol de navidad!
¿Cuál es la mecánica del servicio?
El cliente debe tener el árbol de navidad y las luces. A partir de eso, mi mamá y yo llegamos con un empleado, el que siempre nos ha ayudado en esta labor, en el día acordado y nosotros armamos el árbol. Lo dejamos listo para que la familia lo disfrute, y en la fecha indicada, regresamos a retirar los adornos y todo queda en orden.
Demasiado bueno para ser verdad…
Queremos ser un alivio para estas fechas cuando todo es en carreras y estás bajo tanta presión que terminas sin verdaderamente disfrutar. Con nuestro servicio no tendrás que invertir una tarde en armar el árbol, otra en desarmarlo, pensar dónde guardar los adornos, no te aburrirás cada año con el mismo árbol y no tendrás que gastar enormes sumas de dinero comprando nuevos adornos.
¿Qué costo tiene el arriendo de los adornos para el árbol?
Recordando que el árbol y las luces son del cliente, el arriendo de los adornos cuesta $150 para un árbol tamaño promedio, incluida la mano de obra. El precio podría variar un poco considerando que hay árboles más grandes y otros más pequeños, pero, si consideras el costo de comprar la decoración de tu árbol cada año, este valor es menos de la mitad de lo que tendrías que pagar.
¿Cuánto costaría comprar adornos para un árbol tamaño promedio?
Comprar adornos te representaría un gasto de entre $600 y $700. Esto sin tomar en cuenta el tiempo que toma parar el árbol, colocar las luces y decorar. Todo lo hacemos nosotros.
Cristina, ¿hay una moda en decoración de árboles?
No, para nada. La creatividad hace realidad una fantasía, eso es todo. Si vamos para atrás, recordaremos que la decoración de los árboles antes de que existieran los almacenes que venden objetos navideños era más pobre, más sencilla, pero igualmente hermosa. Hoy hay una profusión de elementos que se pueden usar, pero tienen su costo. Lo interesante es poder usar la mano de obra nacional para, a futuro, crear cada vez cosas más interesantes y atrevidas sin necesariamente caer en el extremo de lo folclórico.
¿Tendencias en cuanto a colores?
Los colores van de acuerdo al gusto de cada persona. Hay mil posibilidades de combinación, la diferencia es que mis diseños tienen la creatividad de cosas hechas por nosotras mismas. Un árbol es de ángeles. Otro tiene todos los mini elementos de cocina que se encuentran en los mercados de la ciudad, hechos en madera o latón, y como guirnaldas cocineros solos o tomados de la mano. Otro que por la profusión de sus colores y los animalitos y flores hechos en balsa, le recuerdan a Isabel de la selva.
Son ideas muy originales…
Es que la Navidad de cada familia es sobre originalidad, cada árbol debe ser único. Isabel añade, no sólo eso, sino que la belleza está en la creatividad, en la diferencia, en saber que como son hechos “en casa”, el producto no es masivo y no se parecerá a ningún otro árbol de Navidad.
¿Pensarían entrar en el mercado de la decoración de eventos?
No es nuestra idea. Mi mamá no quiere saber de decorar eventos de ningún tipo, pero yo creo que hay un espacio que tendremos que estudiar en cuanto a primeras comuniones, cumpleaños, quizá matrimonios, pero siempre con este toque único, de bajo costo, sencillo, más familiar, como se lo hacía a la antigua. En lo que sí podremos ampliarnos el próximo año es en nacimientos, porque mi madre es especialista; en arreglos de centros de mesa, guirnaldas para las puertas, en fin, todo lo que es Navidad.

El árbol que ahora decora el hall de entrada de la casa de los Noboa es una profusión de rojos, con rosetas hechas en cinta blanca y rosas de seda rojas, más otros detalles que se entenderán mejor mirando la foto. La sensación de la Navidad lo envuelve a uno inmediatamente, al punto de casi esperar ver entrar a Papá Noel por la chimenea.

Árboles tan originales y creativos como éste ya han sido armados, o están en proceso de serlo, en varias casas quiteñas. El diseño favorito de Cristina es el de los ángeles; el de Isabel es el que han denominado Selva por su explosión de colores. Para nosotros, la suerte es que podemos escoger entre cualquiera de ellos.