Por Verónica Acosta
agosto-septiembre, 2011

Esta inversión es muy importante. Estamos conscientes que la construcción permite obtener fondos para lograr un mejor desarrollo de obras de infraestructura en el Cantón.

Vivir ahí se ha convertido en un aspiracional de la gente de Quito, lo que ha causado una explosión inmobiliaria en Rumiñahui, el cantón más pequeño de todo el Ecuador, con apenas 134 km2. Su capital, Sangolquí, por estar incrustada en su corazón, se ha convertido en la capital del Valle de los Chillos.
Para conocer cómo enfrenta el Municipio de Rumiñahui esta aspiración de quienes desean mudarse a vivir en esta jurisdicción, visitamos al Ing. Héctor Jácome Mantilla, Alcalde de Rumiñahui, con quien compartimos una agradable conversación procurando abordar temas de interés para nuestros lectores.¿Cómo manejan la gran demanda de proyectos que llega a diario a la municipalidad?
Soy profesional de la construcción, tengo muy claro los requerimientos y exigencias que se deben cumplir para obtener una autorización municipal para ejecutar un proyecto inmobiliario. En la alcaldía hacemos grandes esfuerzos por agilitar los trámites, pero muchas veces nos encontramos con inconvenientes de distinto orden que complican la tramitología y demoran la obtención de los permisos correspondientes.
¿Qué tratamiento da el Municipio a la inversión que los constructores inmobiliarios realizan en el Valle?
Esta inversión es muy importante pues estamos conscientes que la construcción permite obtener fondos para lograr un mejor desarrollo de obras de infraestructura en el Cantón. Además, beneficia directamente a la comunidad creando miles de puestos de trabajo y generando recursos para la gente que vive en Los Chillos. La vivienda va de la mano con el comercio, industria, educación, etc., y permite la consolidación de un desarrollo sostenible y creciente.
¿Qué hace al Valle tan atractivo?
En el Distrito Metropolitano de Quito el espacio está saturado y ya no hay donde desarrollar más proyectos de vivienda. Los Chillos, por el contrario, ofrece grandes extensiones de terreno donde los urbanistas combinan su buen gusto con el entorno, generando viviendas de mayor tamaño con amplios espacios verdes. Es por esto que los constructores se han movido hacia los valles con oferta muy agresiva con variedad de estilos, precios y tamaños, para todos los gustos y bolsillos.
¿Cómo evitar que Sangolquí se convierta en otra ciudad de cemento como Quito?
Considerando que los constructores buscan la optimización del terreno que les permita una rentabilidad aceptable con la venta de los proyectos, somos muy estrictos en el cumplimiento de la norma de uso de suelo. Ésta exige que se dé al Municipio el 10% del terreno donde se construya cualquier desarrollo habitacional.
¿El 10% del terreno? ¿Con qué fin?
Ese 10% debe quedar como áreas verdes o pequeños parques recreacionales para el uso de la comunidad. Uno de los graves problemas que enfrentamos es que las grandes haciendas del Cantón, que por la necesidad de mantener la hegemonía del bien, si bien no están fraccionadas, ya están parceladas de hecho. Sin el fraccionamiento el Municipio no se beneficia con el 10% de esos espacios.
¿Se controla el crecimiento de la construcción?
El Plan de Desarrollo que está por consolidarse en estos días es una actualización del que teníamos de los años 80. Ha sido adaptado a las necesidades urbanísticas del momento y contempla todas las
aristas: retiros, ocupación del suelo, iluminación, calzadas, veredas, espacios comunales, áreas verdes y mucho más.
¿Novedades con el impuesto predial?
Somos discretos, respetuosos y pacientes considerando que es un tema muy sensible, tanto para quienes construyen como para quienes compran un bien inmobiliario. Debemos ser mesurados para fomentar la inversión y motivar el desarrollo. La decisión la tiene el Consejo Cantonal, pero he apelado a su sensibilidad para no elevar los impuestos. La ley permite su revisión cada dos años por lo que tendríamos que hacerlo en noviembre de este año.
¿Cómo mejorar la atención en la obtención de permisos y autorizaciones municipales?
Estoy comprometido a mejorar el servicio. En noviembre debe concluir la recuperación de la Casa Vieja Municipal, donde se implementará un Balcón de Servicios, a fin de que todos los trámites sean virtuales. El usuario no tendrá contacto directo con el empleado sino que en una ventanilla obtendrá una respuesta inmediata a su trámite. Definitivamente habrá innovación en atención a constructores y desarrolladores de proyectos.
¿Qué obras se han ejecutado?
Estamos terminando la recuperación urbana del centro de la ciudad que incluye la Iglesia principal, su cubierta, pintura de interiores y exteriores, fachada, etc. El parque Juan de Salinas, donde se ubica la Iglesia, está en pleno proceso de recuperación, así como las calles aledañas. Hemos llegado con adoquín a todas las parroquias del Cantón, donde hace poco, el polvo y el lodo de las calles eran parte de su hábitat.

ING. HÉCTOR JÁCOME MANTILLA ALCALDE DE RUMIÑAHUI

¿Temas pendientes?
El proyecto Socio-Patrimonio que consiste en la recuperación de las propiedades patrimoniales del parque Juan de Salinas para convertirlas en posadas, albergues, hoteles, está pendiente. Para su ejecución estamos hablando con el Gobierno Central.
¿En cuanto a desarrollo del turismo?
Hay que consolidar a los Chillos como un importante destino por la variedad de sus atractivos turísticos. Sólo en el Río Pita hay 27 cascadas de las cuales apenas conocemos 3. Tenemos históricas haciendas tan bien descritas en esta revista. Qué lindo sería ofrecer visitas guiadas y cabalgatas por las haciendas bajo rigurosos convenios de seguridad, lógicamente. Tenemos parques con esculturas de artistas plásticos de renombre; hemos mejorado la vía de 42 km. que une el Valle con el Cotopaxi, conservando sus curvas y vericuetos, manteniendo intactos sus encantos y la vegetación típica de la serranía. El anillo vial que bordea el valle pasando por los 7 volcanes será algo único en el Ecuador y cautivará a muchos turistas.
¿Cómo recuperar los ríos que han sufrido un grave deterioro?
Rescatar el Río Santa Clara costará $4.5 millones, estamos consiguiendo los fondos. Estamos terminando los estudios del Río Capelo. Para evaluar y dar seguimiento del grado de contaminación del Río Pita y el San Pedro firmaremos un convenio con la Facultad de Geología, Minas y Medio Ambiente de la
Universidad Central; Con el Embajador de México, Ernesto Campos, hicimos un convenio para la recuperación del rio Pita, columna vertebral del Valle de los Chillos. Recuperar los ríos es nuestro compromiso con las presentes y futuras generaciones.
¿En el campo de la salud?
Gracias al compromiso del Gobierno y a las magníficas relaciones con los ministerios, estamos a punto de firmar un convenio mediante el cual el Municipio de Rumiñahui dona dos hectáreas de terreno y el Ministerio de Salud construirá el Hospital Regional Rumiñahui. Entiendo que el IESS también ha adquirido un terreno donde construirá un hospital regional, de tal manera que el Valle va a estar muy bien atendido en este sentido.
Hablemos de la basura…
Logramos sacar silenciosamente y sin aspaviento, el botadero natural donde se arrojaron 200.000 toneladas de basura. Si bien era una estación de transferencia, causaba las consabidas molestias a las industrias y los moradores del sector. Para recolección de los desechos sólidos, los ecotachos resultaron un éxito gracias a la colaboración de la ciudadanía.
¿Cómo hacer que el Valle deje de ser “ciudad dormitorio” de quienes trabajan en Quito?
Debemos trabajar en una solución para evitar que 100.00 personas se desplacen cada día a trabajar en Quito y vuelvan a dormir en el Valle. Debemos crecer económicamente, facilitar la creación de nuevas fuentes de trabajo, lograr un desarrollo sustentable, atraer industrias, comercio, turismo, etc. de tal manera que la población desarrolle aquí sus actividades diarias y no solamente duerma en Los Chillos.

Sangolquí se ha vuelto un centro de atracción para las 6 parroquias urbanas del Valle: Amaguaña, Conocoto, Guangopolo, Alangasí, la Merced y el Tingo, que no cuentan con la infraestructura necesaria.

¿El problema de la movilidad?
Estamos trabajando con el Gobierno de la Provincia de Pichincha, para dar soluciones prácticas a este problema. La Prefectura construirá dos vías: la una con un costo de $3.5 millones que parte de la autopista, a la altura del Puente Farina se desvía hacia la Av. Amazonas, para empatar con la Av. Ilaló, prolongación de la Intervalles que también es manejada por el Consejo Provincial. La otra, desde el mismo puente Farina hacia la Bocatoma, con un intercambiador que permita utilizar el Camino Viejo a Conocoto y cruzará por la Mariana de Jesús que va por Capelo. Otra vía importante es la Panzaleo. Pasa por el sector de Fajardo hacia Cuarteles, por la hacienda Balbina, ayudando a descongestionar el tráfico existente en la actualidad.
¿Cuándo se ejecutarán?
El proyecto de la Prefectura está listo y cuenta con los recursos. La construcción iniciará en pocos meses y aliviará en un 40% la congestión en el Triángulo. El Municipio hará del alcantarillado, el viaducto, la vía sumergida que pasará por ese sector y vías alternas como la calle Toa que está en el límite con la Parroquia Amaguaña del Cantón Quito. Con el adoquinamiento de esta vía y el puente al pie de la Casa de la Moneda, dotaríamos de una gran solución para que los vehículos que vienen del sur se desvíen y puedan cruzar por Conocoto hacia Quito. A finales del 2012 podríamos estar inaugurando algunas de estas obras.
Qué va a pasar en el sector del Colibrí, considerando que este será el punto neurálgico para el tráfico que vaya de las Provincias del Sur hacia el Aeropuerto de Tababela.
El desarrollo de esta zona es fabuloso. Estamos trabajando en la ampliación de la vía a 4 carriles. La vía que unirá Tababela, pasando por Checa y Pifo, con Sangolquí, será la ruta más corta para llegar del aeropuerto hacia el sur de Quito, lo que posiblemente nos obligue a que la vía que pasa por el Colibrí se amplíe a 8 carriles.
¿Cómo fomentar el desarrollo comercial del sector?
Tenemos en marcha interesantes proyectos de centros comerciales. El San Luis Shopping rompió todas las expectativas. Actualmente supera los 50.000 visitantes en sábados y domingos. El Hipermarket es otra gran inversión; Supermercados Mega Santa María, AKI, TÍA y todas las grandes cadenas poco a poco van llegando al Valle para satisfacer la enorme demanda existente. Además, en estos días espero recibir el anteproyecto de un Centro Comercial enorme para ubicar a los 1.500 vendedores informales que se asientan en los alrededores del mercado central. El fin de semana los quiteños hacen sus compras en Sangolquí, a pesar de los inconvenientes que representan el peaje y el cruce del Triángulo.
¿El proyecto de Centros Municipales de Educación Inicial?
Contamos con 10 centros de nivelación para que los niños se integren a los centros educativos municipales. Empezamos con 60 alumnos y hoy tenemos 700. La educación es de primer orden y es muy valorada por la comunidad. Hay mucho por hacer, pues Sangolquí se ha vuelto un centro de atracción para las 6 parroquias urbanas del Valle: Amaguaña, Conocoto, Guangopolo, Alangasí, la Merced y el Tingo, que no cuentan con la infraestructura necesaria.
¿En cuanto al deporte?
Tenemos buenos complejos barriales para la práctica del deporte. Haber logrado la conformación del equipo de futbol profesional “Independiente del Valle”, fue un gran esfuerzo, considerando que en el valle hay 417 equipos de fútbol. Está previsto que cuando el Independiente tenga que jugar como local, jugará en la noche, porque tiene su estadio iluminado.
¿El Patronato Municipal está a cargo de su Señora Esposa?
El trabajo que realiza Ruth, mi esposa, es enorme y lo hace con los más pobres del área rural, sector de la Tolita y en Santa Rosa. En San Rafael tenemos un centro de apoyo a niños, jóvenes y personas de la tercera edad, que es muy bien aceptado. Actualmente trabajan en capacitación, salud, desarrollo micro-empresarial con viveros, cuyeras, conejos, etc. Hay programas de música, danza, etc. Ojalá más personas acudirían a estos programas para aprovechar del beneficio de la silenciosa y comprometida obra que realiza mi esposa.