Por: María Cárdenas R
junio – julio 2011

Cayetano Uribe

“No imprimimos nuestro estilo, en nuestras obras no dejamos una firma reconocible, sino la interpretación de los gustos y necesidades de nuestros clientes, sin importar si el espacio a trabajar es un dormitorio o una casa entera, llave en mano.”

¿Cuál es el inicio de Cayetano Uribe?
Me gradué en Administración y Finanzas con un segundo título en Administración Hotelera, me gustaba tanto la hotelería que juntándola a mi gusto por viajar, era la combinación perfecta. Lo recuerdo, desde que tenía ocho años, lo único que me atraía especialmente era conocer y dar vueltas por el mundo, así que mi carrera tenía que incluir la posibilidad de viajar, mientras más, mejor. Hasta hoy, admito que el hobby de mi familia es ese, no queremos propiedades en ningún lado, sino la libertad de viajar por el mundo. Cuando estudié en los Estados Unidos durante seis años desarrollé mis dos profesiones. Cuando regresé, no trabajé en hotelería a pesar de buenas ofertas por los Hoteles Camino Real que nacieron de las 60 entrevistas pagadas que me llevaron de un rincón a otro del mundo. Fueron cuatro meses viajando.
¿Y Luego?
Mi papá quiso que lo ayudara aquí con su empresa de tela de polipropileno y pensé que la realidad de manejar gente en Ecuador era una verdadera experiencia, diferente de la que podría tener en otro lado. Así que vine y conocí a Yoli, mi esposa, quien obviamente cambió el rumbo de mi vida.

Mis dos empresas se caracterizan porque no imponemos nuestro estilo, somos una guía, asesoramos para que el evento, o la casa, sean del dueño, no nuestra.

¿Y tu carrera?
Dos años después de trabajar con papá, decidí hacer algo con mi carrera y apliqué para brindar servicio de comida industrial. Comencé con la Corporación Financiera Nacional con 450 personas al día. Esta empresa funcionó durante 18 años y terminamos con 5500 personas cada día. Una experiencia que nos permitió tener 65 cocineros y cuartos enteros de pollos e ingredientes.
Mucho trabajo…
Para que tengas una idea, si en el Banco Central se atrasaba por dos minutos una olla de arroz, terminabas con una fila de 500 personas. Un minuto de descoordinación nos costaba muy caro, un trabajo de precisión extrema.
¿Cómo llegas a la decoración de eventos?
Los eventos siempre me han encantado y una de las prácticas la hice en St. Moritz, Suiza, en el Palace Hotel, reconocido como el hotel más Jet Set del mundo, donde más celebridades llegan y por lo tanto las fiestas son las mejores. También estuve en el Hotel Monopol de las mismas características del Palace, allí trabajé durante seis meses con fiestas magníficas, lo más refinado que he visto en mi vida. Recibí, entonces, una llamada de Carmen Brickman, su hija se casaba, y sin decir más, me encomendó organizar el matrimonio, a pesar de haber aclarado que sólo había realizado prácticas en este campo. Antes de esto,
había conversado con Mónica Sevilla la posibilidad de hacer algo en el tema de decoración de eventos. La llamé, le conté, y sin más, teníamos nuestro primer contrato. Esto hace 28 años.
¿Naciste con estrella?
Bueno, así fue… este contrato nos permitió ser altamente creativos, un evento caído del cielo que fue diseñando mi camino antes que yo mismo lo hiciera conscientemente… aunque siempre tuve la idea.

Cuando nos sentamos a trabajar, esta mezcla nos permite resultados originales y maravillosos. El no encasillarnos, en estilos ni en productos, es nuestro éxito.

¿Y el negocio de comida industrial?
Aún seguía con la comida industrial, Yoli trabajó sin descanso e intensamente durante diez años y ya se iniciaba el negocio de los eventos con Mónica Sevilla. Comenzamos a dejar uno a uno los contratos de comida industrial que, sin duda, es agotador, para dedicarme únicamente a los eventos. Aquí, si haces las cosas bien, la gente lo ve, comienza a buscarte y a contratarte.
¿Cómo se inicia DDRI Uribes y Asociados?
Cuando llevaba en eventos unos diez años, mi hermana Gabriela y Mónica Uribe de Brauer, tuvieron la idea de unirse y hacer un pequeño negocio de diseño de utilería y accesorios. Cuando me contaron, pensé que dos profesionales con gran potencial, Gaby decoradora y Mónica arquitecta graduada en tres universidades, no debían desperdiciarse. Nos reunimos y nos decidimos por algo más importante. Aunque no soy arquitecto, tengo todos los cursos de arquitectura, obligados por el tema de administración hotelera, y esto era un complemento a las profesiones de las dos. Así nace DDRI Uribes y Asociados. Armamos una empresa que comenzó renovando un dormitorio, diseñando un mueble o decorando un espacio específico.
¿Qué caracteriza tu trabajo?
Mis dos empresas se caracterizan por no imponer nuestro estilo. Somos una guía, asesoramos para que el evento, o la casa, sean del dueño, no nuestra. Hay arquitectos y diseñadores que imponen su estilo y sólo crean dentro de ese ámbito.

Nuestro objetivo es realizar y cumplir al centavo un presupuesto gracias al conocimiento de los estilos y sobretodo de la amplia variedad y diferentes calidades de materiales que conocemos a la perfección.

Y ustedes…
Nosotros tenemos un arco iris de clientes en todos los estilos. Es más difícil, debes prepararte y conocer los diferentes estilos y cuáles y cómo se combinan entre si. Esto es lo que hemos logrado, desarrollar el estilo que quiere el cliente a la perfección y dentro de su presupuesto. Nuestro lema es no imponer nuestro estilo! Es su casa, es su ambiente y hemos tenido una aceptación increíble. Diría que el 90% de nuestros clientes prefieren decir que es su propia decoración, no hecha por nosotros. Ese es su orgullo. Para confirmar lo que te digo, puedes ver las fotos, los estilos son totalmente diferentes, es decir, al gusto de cada cliente, convirtiéndolo en algo único, difícil de copiar. Igual nos ha sucedido con restaurantes, hoteles, spa y almacenes.
¿Trabajan sólo en Ecuador?
Hemos sobrepasado las fronteras del Ecuador con nuestro trabajo realizando obras de asesoría y decoración en otros países. Por ejemplo, tenemos un contrato con la cadena de hoteles Dann de Colombia con quienes hemos trabajado mucho como asesores.
Entre los socios, ¿son similares en su gusto, su estilo?
No, y eso es justamente muy interesante, porque nos brinda aún más libertad. Gabriela tiene preferencia por lo moderno, líneas muy rectas; Mónica, un estilo más ecléctico y yo soy totalmente clásico, incluyendo las antigüedades, las borlas, un estilo muy inglés.
Son un complemento…
Cuando nos sentamos a trabajar, esta mezcla nos permite resultados originales y maravillosos. El no encasillarnos en estilos ni en productos, es la base de nuestro éxito. Hacemos de todo: contemporáneo no minimalista de líneas rectas, moderno, estilo oriental, ecléctica con estilo inglés, en fin, todo tipo de mezclas que resultan en espacios que reflejan el estilo de vida único que tiene cada cliente.
¿Es costoso un decorador?
Es importante ajustarse a un presupuesto. Decorar, diseñar o renovar un espacio no es costoso. Insistimos que contratar a un profesional es más barato que hacerlo personalmente, porque lo único que pagas es un porcentaje extra al costo: los honorarios.
¿Entonces ahorras con un decorador?
Donde está el gran ahorro y esto es muy importante entender, es que lo que compras es definitivo. Las cosas se compran o diseñan específicamente para los espacios existentes, de acuerdo al estilo, a los colores y al uso que se le va a dar. Es más barato hacer bien desde el inicio que parchar. Nuestro objetivo es realizar y cumplir al centavo un presupuesto gracias al conocimiento de los estilos y sobretodo de la amplia variedad y diferentes calidades de materiales que nosotros conocemos a la perfección. Puedes trabajar con productos originales a un precio o con copias de primera calidad, sin sacrificar el estilo.
¿Metas?
Los proyectos llave en mano serían realmente nuestra meta con todas las obras que realizamos. Es decir, iniciar con la arquitectura y entregar la casa a los dueños incluyendo la ropa blanca y hasta los jabones en los baños.
¿Un consejo?
Trabajar con profesionales. El profesional hará que la idea sea aún mejor en la realidad de lo que el cliente se imaginó, a un precio exacto. Hacemos realidad los sueños, sin cambiarlos, sintiendo, captando al cliente a través de reuniones en su propio ambiente. Nuestras sugerencias, al no imponer, lo que resaltan es el reflejo propio del cliente.