Por: Alexis Guerrero
junio – julio, 2011

Lo que yo quería era que mi departamento sea perfecto, pero que tenga mi nombre en cada rincón, que sea “yo” en todas partes.

Su estilo de vida se desarrolla entre el trabajo, la familia y los amigos. La ubicación de su departamento en el sector de la González Suárez le permite cumplir su agenda diaria con poca demora. Se encuentra en plena ciudad, en ubicación residencial, cerca de todos los servicios, centros de diversión y a pocos minutos de la salida a Cumbayá. En el presente, éste es su sector ideal. En un futuro cercano, con el crecimiento de la familia, piensa mudarse a Cumbayá.

¿Qué te hizo comprar departamento en este sector?
Mi marido compró este departamento antes de comprometernos, me imagino que ya tenía planes de casarse… Por suerte acertó en la ubicación, no puede ser mejor. Lo compró en planos y fue perfecto porque cuando ya estábamos comprometidos fui parte del proceso de la arquitectura de interiores y, obviamente, de la decoración.
¿Lo hiciste sola o contrataste algún profesional?
Contraté a Lorena Uribe cuando el edificio estaba en obra gris. La relación con ella fue sumamente fácil porque es una estupenda profesional y además es muy amiga nuestra. Hicimos algunos cambios y definimos con ella todos los acabados.

A cada espacio, por más pequeño que sea, le hemos sacado provecho y hemos optimizado su uso. Cada rincón tiene su detalle: flores, toallas, velas, olores.

¿Decisiones conjuntas?
Las decisiones las tomamos entre los tres, con mi marido incluido. Afortunadamente él tiene muy buen gusto porque de lo contrario hubiera sido un desastre. Se involucró en todo… a veces demasiado! Él tiene sus preferencias muy marcadas. Le gusta el arte y le dedica mucho tiempo a escoger las piezas que compra porque considera que es una inversión para toda la vida. Además de eso, él eligió varios muebles y puso mucha atención al tema del audio en el departamento. El bar es otro de los elementos en los que se enfocó.
¿Qué cambios hicieron?
Cambiamos las gradas y algunos detalles en la distribución. En cuanto a los acabados, escogimos elementos para dar un toque distinto, personal, a cada rincón del departamento. Teníamos claro lo que queríamos. Además compré millón revistas en los Estados Unidos y con esa guía le decía a la decoradora las cosas que quería.
¿Siempre te gustó la decoración o este fue tu debut?
Mi mama es diseñadora de interiores frustrada. Toda la vida se ha dedicado a decorar casas, es algo que le encanta. Siempre decoró personalmente todos los lugares donde vivimos y ha ayudado a sus amigas a decorar sus departamentos. Hace cosas maravillosas. Pienso que mis tres hermanas y yo heredamos un poquito de esa afición y buen gusto.

Es curioso, pero casi todas las parejas de recién casados buscan departamentos por aquí y luego, al igual que nosotros, piensan en hacerse una casa más grande cuando lleguen los hijos.

¿Los muebles fueron comprados o los mandaste a hacer?
La gran mayoría de cosas las mandamos a hacer porque, como te digo, nos apoyamos mucho en revistas de decoración internacionales. Por esta razón era muy difícil encontrar aquí lo que quería. Fueron realmente muy pocas las cosas que encontramos hechas. Además, teníamos tantos adornos entre los regalos de matrimonio que nos sirvieron de complemento para los muebles grandes.
La tina del cuarto de baño es muy llamativa…
Tuvimos mucha suerte porque decidimos importarla en el momento en que se cerraban las importaciones. Llegó justo a tiempo. Fue mi marido el que tuvo la fijación de colocar ahí una tina porque le ilusionaba mucho disfrutar la vista que tiene desde esa ventana. Realmente nunca la hemos usado pero siempre la mantengo con flores frescas porque si bien la tina es un elemento práctico, también es decorativo. Soy muy detallista en mi departamento, me encanta que todo esté perfecto.
El trabajo en iluminación es fantástico…
El mérito es 100% de Lorena. Todo lo relacionado con la arquitectura interior lo hizo ella. En la decoración fue donde participamos todos. Lo que yo quería era que mi departamento sea perfecto, pero que tenga mi nombre en cada rincón, que sea “yo” en todas partes. Me aterra la idea de que parezca una casa modelo que mucha gente compra porque está bien decorada pero carece de personalidad. Por eso me involucré tanto.

En Cumbayá no hay departamentos, en Quito no hay terrenos para construir casas. Así las cosas, la decisión se basa más en esta circunstancia que en otra cosa.

¿Te ves reflejada en él?
Absolutamente. Soy detallista, perfeccionista. A cada espacio de este departamento, por más pequeño que sea, le hemos sacado provecho y hemos optimizado su uso. Cada rincón tiene su detalle: flores, toallas, velas, olores. Nada es casualidad, todo está perfectamente pensado y está donde está por alguna razón. La mesa del comedor tiene un tamaño para la vida diaria y una extensión para cuando tenemos invitados. Todo se adapta y va con nuestra personalidad y estilo de vida.
¿Siempre quisiste un loft?
Siempre quise un espacio así, con sala, mini sala, comedor, concina, dos habitaciones, sala de estar, un mini estudio, baño social, vista… Me encanta que sea un loft dúplex con espacios integrados. Es lo perfecto para una pareja de recién casados porque cada uno realiza su actividad pero de alguna manera estás en el rango visual y comunicativo con el otro. La cocina está integrada al comedor y los ambientes se comunican con armonía.
Me decías que la ubicación no puede ser mejor. ¿Por qué?
Para mí es fantástica. La mayor parte del tiempo que viví con mis padres vivimos en el sector de la Av. González Suárez y Bosmediano, muy cerca de aquí. Hace unos 7 años nos cambiamos a Cumbayá, pero a la hora de casarme y volver a Quito, tuve suerte en que esta ubicación ya me era familiar. Puede ser un tema de costumbre, pero me siento muy cómoda y segura en este sector.
¿Qué te gusta de este sector?
Es cómodo, las distancias se acortan, estoy cerca de mi trabajo, de los centros comerciales, del Supermaxi, de mis amigas. Hemos hecho una cantidad de invitaciones. Disfruto mucho de poner lindo mi departamento, decorar para cada ocasión y dar comida deliciosa a mis invitados. Muchos de nuestros amigos viven en el sector. Es curioso, pero casi todas las de parejas recién casados buscan departamentos por aquí y luego, al igual que nosotros, piensan en hacerse una casa más grande cuando lleguen los hijos.
¿Cuál es la diferencia entre vivir en Cumbayá y vivir en Quito?
Al vivir en Quito estás más conectada. Tal vez tienes más bulla y tu día a día está matizado con el estrés propio de la ciudad, pero en cuestión de tráfico te diría que Cumbayá es mortal. En el valle obviamente tienes más vida de campo, buscas actividades al aire libre y el clima es más cálido. En mi caso, aún viviendo en Cumbayá tenía mi oficina en Quito y era donde pasaba la mayor parte del tiempo.
¿Entonces Cumbayá no era una opción para este primer departamento de casada?
Al principio, como pareja joven y recién casada, queríamos un departamento de estas características. A futuro, cuando la familia crezca queremos construir una casa y ahí veremos las opciones que haya en el mercado. En Cumbayá no hay departamentos, en Quito no hay terrenos para construir casas. Así las cosas, la decisión se basa más en esta circunstancia que en otra cosa. He aprendido a gozar de las virtudes de las dos ubicaciones.
Según esto, ¿este departamento sería tu “primera parada”?
Llevamos aquí un año y medio y pensamos que aún nos quedamos por algún tiempo. Tenemos dos dormitorios así que el primer bebé que tengamos vivirá sus primeros meses aquí. Cuando empiece a caminar tendremos que buscar otra opción para vivir o, si decidimos quedarnos, habrá que cambiar mucho del diseño de este departamento.
¿Por qué cambiar el diseño?
Porque este departamento no está pensado para niños en edad de caminar. Las gradas, por ejemplo, no tienen las seguridades necesarias para evitar que un niño tenga accidentes. Hay mil cosas que debes tomar en cuenta cuando decoras para una familia con hijos y que son muy diferentes a las consideraciones que tienes en cuenta cuando decoras para una pareja de adultos.
¿La opción sería casa con jardín?
Eso sería lo ideal, y pienso que Cumbayá es la ubicación perfecta. Nuestro estilo de vida con niños tendría otras prioridades que privilegian la vida al aire libre y en el valle tienes mejor clima y menos contaminación. Además en Cumbayá hoy tienes los mejores colegios y todos los servicios. Lo único estresante son las distancias y el tráfico.
¿Algún sector en Cumbayá al que hayas puesto el ojo?
Hemos visto algunas opciones y descubrimos que hay una tendencia muy marcada. Mientras más cerca estás a Quito las áreas para jardines se reducen. Si te alejas de la ciudad tienes espacios verdes más amplios. En cualquier sentido hay algo que sacrificar. El valle tiene muy buenas opciones pero las distancias y el tráfico son algo que debes considerar.